Opinión | Inteligencia artificial y protección de datos

Columna de opinión de Andrés Alcalde, socio fundador de Moov Media Group, holder de Moov, empresa socia de la AMDD.


Con el avance de la inteligencia artificial (IA) y el desarrollo de experiencias generativas a través de las herramientas conversacionales, se tendrá acceso a información detallada y sensible de los usuarios: lo que buscan, sus preferencias de compras, etc., lo cual genera una incertidumbre respecto de cómo se protegen los datos y se lleva a cabo la seguridad de los clientes.

Cada empresa debe asumir la responsabilidad de garantizar que estos datos se manejen de manera ética y segura, siendo crucial que se preparen para adaptarse a medida que la tecnología avanza y los algoritmos de la IA evolucionan hacia una era de interacción más inteligente y conversacional.  

La capacitación y adquisición de habilidades para estas herramientas se vuelven esenciales para sacarles partido y mantenerse actualizado frente a las cambiantes demandas del mercado junto con estar al día sobre las mejores prácticas de protección de datos y seguridad, que incluye proteger la privacidad de los clientes y estar al tanto de las posibles amenazas y riesgos.

Por otro lado, es fundamental que sean transparentes con sus clientes acerca de qué datos se recopilan, cómo se utilizan y con quién se comparten, siendo imperioso obtener el consentimiento informado de los usuarios antes de guardar cualquier información personal.

Implementar medidas sólidas de seguridad para proteger los datos de los clientes hoy es imprescindible e implica desde utilizar cifrado, firewalls y otros protocolos de seguridad para prevenir accesos no autorizados junto con mantener los sistemas actualizados y realizar regularmente auditorías de seguridad.

Asimismo, con el fin de reducir los riesgos asociados con la pérdida o el mal uso de información sensible, se sugiere que las empresas minimicen la recopilación de datos y obtengan solo los necesarios para llevar a cabo las interacciones con los clientes. 

A medida que avanzamos hacia una era de interacción más inteligente y conversacional en el marketing, la clave es encontrar el equilibrio adecuado entre la personalización y la privacidad. Una tarea pendiente en muchas empresas será abordar la protección de datos y la seguridad para garantizar una adopción exitosa y ética de estas nuevas tecnologías porque solo así podremos sacarle el máximo partido al potencial de la IA.

Moov Media Group se convierte en el primer aliado de la nueva área de servicio Brand&Growth de Endeavor

Con miras en afianzar y ampliar sus conexiones, Moov Media Group, grupo de empresas al que pertenece Moov, socia de la AMDD, se unió recientemente a Endeavor, organización reconocida a nivel mundial por potenciar emprendimientos y formará parte de su nueva área de servicio Brand&Growth.

Las estrategias de marketing son fundamentales para los emprendedores y scaleups, abarcando desde la metodología, las estructuras de equipos y la implementación de planes de trabajo. Por esta razón, Endeavor inauguró su nueva área de servicio de marketing llamada Brand & Growth, para apoyar a los emprendedores en sus estrategias de marketing, siendo Moov Media Group la primera empresa en unirse a ella.

“Para nosotros es una gran oportunidad como agencia de marketing integral y como emprendedores, debido a que esta nueva área de Endeavor aportará un enorme apoyo al ecosistema nacional a través de contenidos e instancias de valor,” señala Rodrigo Andrade, cofundador y director de la empresa.

Por su parte, Ignacio Miranda, también cofundador y director de Moov Media Group, explica que “estamos muy entusiasmados debido a que esta unión viene a potenciar nuestros planes de afianzar y ampliar nuestras conexiones, junto con darnos la posibilidad de aportar en el crecimiento de nuestro ecosistema nacional, lo que nos motiva enormemente.»

Moov Media Group cuenta con tres unidades de negocio especializadas: Metrix, una agencia consultora en medios digitales; Forma, un software factory que brinda soluciones tecnológicas y de data analytics; y Moov, una agencia creativa con foco digital. Estas tres áreas trabajan entrelazadas por prácticas únicas de growth marketing, lo que representa su gran diferencial.

 “Nuestra estrategia se basa en la sinergia entre nuestras tres unidades de negocio especializadas y ligadas al mundo digital, capaces de implementar soluciones de marketing omnicanal, integrando tecnología, data analytics, medios digitales y publicidad. Contamos con un modelo de integración colaborativo, que nos permite trabajar de manera específica o integral con cada uno de nuestros clientes”, expresa Andrés Alcalde, cofundador y director de la empresa.

La importancia de la nueva área de servicio Brand&Growth de Endeavor radica en que en la actualidad existen múltiples canales disponibles para los consumidores, los cuales, con un correcto plan de marketing, pueden ser aprovechados para potenciar negocios desde sus inicios.

«Los emprendedores, debido a su rápido crecimiento, enfrentan diversos desafíos, entre ellos, el poder construir una marca consistente con propósito, que se adapte a otros mercados y que perdure en el tiempo, por lo que tener una estrategia de marketing que permita alinear todas las acciones resulta clave para lograr el éxito. Desafíos en los que Moov Media Group son un partner ideal para ayudarnos a entregar este servicio», explica Bárbara Hughes, directora de esta nueva área de Endeavor.  

Desde sus inicios en el 2010, los socios Andrés Alcalde, Rodrigo Andrade e Ignacio Miranda visualizaron una gran oportunidad en el mundo digital, y hoy en día Moov Media Group cuenta con 232 colaboradores en países como Chile, Argentina, Venezuela, Paraguay, Uruguay y México. Además, trabajan con más de 120 clientes, entre ellos Caja los Andes, BUPA, Skechers, Kitchen Center, Pfizer, Finning, entre otros.

Opinión | Diversidad, equidad e inclusión

Columna de opinión de Danisa Lonza, gerente personas y cultura en Moov Media Group, empresa asociada de la AMDD


En la actualidad, la diversidad, la equidad y la inclusión son aspectos cada vez más valorados en el
mundo empresarial. Crear un ambiente laboral que fomenta y respeta las diferencias de cada uno de sus colaboradores es fundamental para el éxito y la sostenibilidad de las empresas.

Hoy es posible observar equipos conformados por personas de diferentes nacionalidades, géneros,
gustos, religiones y orientaciones sexuales, lo cual, si bien puede ser un gran desafío, aporta diversos beneficios como una mayor creatividad, adaptabilidad, igualdad de oportunidades, retención de empleados y compromiso.

Las empresas que promueven una cultura de diversidad, equidad e inclusión son más propensas a ser exitosas y sostenibles en el entorno empresarial actual, además de atraer y retener a cualificados talentos.

Además, para las organizaciones, es la posibilidad de dar a conocer sus propios valores e ideales, como, por ejemplo, la equidad de género, que favorablemente es cada vez más considerada a la hora de formar equipos de trabajo, o la inclusión de personas en situación de discapacidad, que ha estado siendo potenciada a través de procesos de selección inclusivos que algunas organizaciones han implementado.

¿Cómo partir? Se debe iniciar desde el proceso de selección, preocupándose por cómo se publican las ofertas, el lenguaje utilizado y las funciones y responsabilidades que deberá realizar la persona, velando por una cultura inclusiva en todo momento.

Una vez seleccionada la persona, es necesario analizar los puestos de trabajo para evaluar, según su diagnóstico, qué adecuación o ajuste necesita para que pueda dar lo mejor de sí. A pesar de lo anterior, es importante continuar fomentándolo, a través del aprendizaje colaborativo, que se puede realizar mediante distintas herramientas, como pueden ser las capacitaciones internas o los canales digitales para compartir información entre colaboradores.

Para las empresas, hacerse cargo de estos temas puede ser muy enriquecedor, posibilitando
aprender a trabajar desde las diferencias, reconociéndose y aceptándolas como un sello propio de
cada colaborador.

Se trata de un camino de aprendizaje constante y mutuo, que sin duda contribuirá a la visión y misión de la empresa. Una cultura inclusiva y diversa permite que las personas de la organización vivan sus diferencias y generen un entorno en el que todos se sientan parte del equipo, lo cual contribuye en el éxito de las organizaciones, especialmente en entornos que cambian rápidamente.