Categoría: Alianzas académicas

Opiniones de Rodrigo Rojo, director del Observatorio de sociedad digital, y de David Díaz, profesor asociado y director del Observatorio de IA e innovación en los negocios, de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, aliada de la AMDD.

---

En el marco de la consulta ciudadana sobre la Política Nacional de Inteligencia Artificial (IA), que busca regular el uso de la IA en nuestros país y que se encuentra en curso, la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, entrevistó a Rodrigo Rojo, director del Observatorio de sociedad digital, y de David Díaz, profesor asociado y director del Observatorio de IA e innovación en los negocios

A través de estas conversaciones, los especialistas nos entregaron una visión detallada sobre los
avances y retos que enfrenta la regulación de la IA en Chile.

Impulsando un Uso Responsable de la IA

Ambos expertos están de acuerdo en la necesidad de promover un uso responsable de la IA en Chile.

Rojo enfatiza la importancia de la educación y la concientización sobre los beneficios y riesgos de esta tecnología. Por otro lado, Díaz destaca la importancia de una regulación flexible que se ajuste a la realidad del país y que se enfoque en regular principios o conductas en lugar de productos específicos. Esto se debe a la incertidumbre sobre los alcances futuros de la IA y la necesidad de no obstaculizar la innovación.

En este sentido, el experto sugiere la creación de mesas de diálogo continuas y una revisión constante de las directrices en lugar de leyes rígidas. Propone un enfoque de sandbox regulatorio desarrollado por diversas organizaciones que pueda adaptarse y evolucionar según sea necesario.

Desafíos emergentes y buenas prácticas internacionales

La regulación de la IA en Chile debe abordar diversas áreas prioritarias. Tanto Rojo como Díaz señalan la necesidad de establecer principios éticos, regular el manejo de datos, garantizar la transparencia y la rendición de cuentas, así como abordar el impacto en el mercado laboral.

Igualmente, ambos enfatizan la importancia de adaptarse a las tendencias emergentes en la regulación de la IA y aprender de buenas prácticas internacionales, como la regulación de la Unión Europea.

Rodrigo Rojo destaca, por ejemplo, la directiva sobre toma de decisiones automatizada desarrollada por
Canadá, la cual requiere evaluaciones de impacto algorítmico en el sector público.

Por otro lado, Díaz resalta la inclinación hacia la autorregulación del Reino Unido, que adopta un enfoque pro innovación al buscar fomentar el desarrollo de la IA en el mercado, al tiempo que establece normas para garantizar la seguridad y la confianza pública.

Colaboración entre actores

Finalmente, tanto Rojo como Díaz destacan la necesidad de fomentar la colaboración entre diferentes actores, incluyendo al gobierno, la academia, la industria y la sociedad civil. Solo a través de un esfuerzo conjunto será posible desarrollar una regulación efectiva y adaptada a las necesidades y realidades del
país.

La regulación de la IA en Chile avanza hacia un enfoque que busca equilibrar la promoción de la innovación con la protección de los derechos y valores fundamentales. La consulta ciudadana sobre la política nacional de IA representa un paso importante en este proceso, y la contribución de expertos como Rodrigo Rojo y David Díaz es fundamental para avanzar en esta dirección.